31 marzo 2006

Antes de que los barcos izen las velas

Estoy aquí, de pie junto al muelle
que depara la aventura
para aquéllos intrépidos

que deciden hacer caso a su corazón.

Estoy aquí, listo para seguir adelante
y volver a subir a nuestro viejo barco,
después de haberlo reparado en el puerto
que Dios nos ofreció para hacerlo.

Estoy aquí, a punto de conocer
a la nueva tripulación:
marinos todos escogidos por mi Padre
para compartir el viaje conmigo.
Los mejores de todo el mundo.

Estoy aquí,

intentando atisbar al horizonte
para saber ¿qué nos depara?

Estoy aquí, mirando
como los barcos izan las velas...
y el mío espera sólo por mí.

¡Ya es tiempo!:
vayamos a navegar
por mares azules y grises por igual;
y que Dios esté con nosotros
hoy, mañana y siempre.

Amén...

1 comentario: