05 mayo 2006

Hecho a mano

Mientras dejaba que "La bañera" sonara dulcemente en la guitarra de mi hermano, vinieron a mi poca mente unas líneas. Pensando un poco en Ti, un poco en ella... en tantas aventuras ya vividas, y en las muchas que nos falta por gozar. También haciendo mi corazón junto a mi hermano... por todo lo que aún nos toca vivir. Para que lo troves a tu hermosa musa, esto es para ti: Wilhem.

Adentro de tus ojos habitan dos relámpagos
Intensos y deseables para mis tempestades.
¿Por qué no te detienes a mirarme, mujer?
¿Por qué prolongas tanto mi muerte dentro tuyo?

Tu melodiosa voz alegra mis jornadas
intenta y desentraña mi historia mal contada.
Te escucho cada frase y no quiero que acabe,
será que tengo el miedo del que ya nada sabe.

Aliento tras aliento voy buscando tus besos,
y un recuerdo imborrable socorre a mis sedientos
labios ilusionados que ansían ser poseídos,
muéstrame el sendero hasta tu bosque eterno.

¿Qué quieres tú de mí?, mujer de pocos lustros.
Será que has encontrado en mí lo que buscabas
o quieres acallar con mi voz un fantasma;
No quiero preguntar, me gustas cuando callas.

Me gustas todo el tiempo, incluso cuando ausente,
pues tu poca presencia aviva el fuego interno
del corazón volcado hacia tu magia y viento,
tu palabra y tu risa, tu delicado vuelo.

Yo quiero proponerte que te enredes conmigo,
que dejes todo el miedo en la sábana enjuta,
que te abandones toda a este buen sentimiento
que en nada más nos daña siempre que estemos juntos.

La distancia es un vuelo, un misterio infinito
mas no hay nada que pueda derrotar a la fuerza
de dos almas unidas, enredadas en vuelo…
Arriésgate conmigo, sólo déjate amar.

Necesito un nombre para este poema. ¿Me ayudas?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario