Si hubiera escrito una entrada diaria desde que abrí el blog, contando ésta nos encontraríamos en el año 2007; 16 de enero de 2007, para ser exactos. Y es que esta entrada es la número 366. No fue así: hoy sigue siendo hoy, mañana espero que llegue a ser mañana y sobre el 16 de enero de 2007, nisiquiera recuerdo qué hice ese memorable día. Pero lee y lo sabrás.
Hoy fue domingo de Super Bowl. No soy tan aficionado al deporte del emparrillado, pero dado que los chicos de Kzoo pertenecen a esta cultura que disfruta de este tipo de espectáculos, que quería disfrutar de un buen rato con ellos, y que los Acereros jugarían el partido los invité a pasar la tarde en mi casa. Fue una experiencia interesante. El simple hecho de estar todos juntos; Caleb sentado en mi mecedora, Julia, Natalie y Tabitha sentadas en mi sofá, viendo el partido de fútbol americano narrado en español (obvio) y hablando todos la lengua de Obama. Sí, fue divertidamente surrealista por momentos. Sobre todo ante la idea de que me puedo emocionar como ellos con las jugadas, puedo lamentar un error de nuestro mariscal de campo, celebrar un regresode patada de 100 yardas, gritar ante otro regreso magnífico que favoreció a los Cardenales... Lo disfruté bastante. Sí señor.
Ahora hay que ir a dormir. Mañana llevaremos a mi madre al médico. Sus ojos necesitan una revisión. Ya veremos qué tiene, espero que esté bien.
Hoy fue domingo de Super Bowl. No soy tan aficionado al deporte del emparrillado, pero dado que los chicos de Kzoo pertenecen a esta cultura que disfruta de este tipo de espectáculos, que quería disfrutar de un buen rato con ellos, y que los Acereros jugarían el partido los invité a pasar la tarde en mi casa. Fue una experiencia interesante. El simple hecho de estar todos juntos; Caleb sentado en mi mecedora, Julia, Natalie y Tabitha sentadas en mi sofá, viendo el partido de fútbol americano narrado en español (obvio) y hablando todos la lengua de Obama. Sí, fue divertidamente surrealista por momentos. Sobre todo ante la idea de que me puedo emocionar como ellos con las jugadas, puedo lamentar un error de nuestro mariscal de campo, celebrar un regresode patada de 100 yardas, gritar ante otro regreso magnífico que favoreció a los Cardenales... Lo disfruté bastante. Sí señor.
Ahora hay que ir a dormir. Mañana llevaremos a mi madre al médico. Sus ojos necesitan una revisión. Ya veremos qué tiene, espero que esté bien.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario