04 julio 2007

Res mutantis

Hoy se murió Pepe Espinoza. Muchos dirán, y a mí qué... Bueno, es que yo tengo buenos recuerdos de sus narraciones, de los partidos de NBA, al lado de un efusivo Enrique Garay, dando su sabio punto de vista y siempre listo para impresionarnos con sus atinados vaticinios. La noticia me tomó por sorpresa, pero más me sorprendió que El Universal, en su edición electrónica, haya mencionado que sólo aparece en un reducido número de páginas de acuerdo al famoso buscador Google; además de no figurar en Wikipedia. ¿En verdad estamos tan adentrados en el mundo electrónico, cibernético y anexas como para medir la importancia de una persona con esos parámetros?

No sé, yo sinceramente no espero que mi epitafio se escriba en Wikipedia, ni que Google me encuentre más de mil ocho mil enlaces. (Aunque este blog ya aparece en sus listas) Me basta que haya personas que me recuerden un poquito, frente a un paisaje digno de C. Doyle, o se vayan a tomar un café a mi salud -o mi muerte- mientras recuerdan alguna de las Logias que vivimos; aunque, claro, es demasiado pedir eso de controlar los recuerdos de los demás.

Hablando del principio del tánatos, ahora que fui a Miahuatlán me hallé con menos gente conocida porque al menos tres de las personas que saludé en mi infancia ya están más allá de estas tierras. No hay mucha nostalgia al respecto, en parte por el tiempo que ha pasado, en parte porque no las traté suficiente como para extrañar algo en especial de cada una. Y sin embargo, algo me faltó en mi terruño esta vez.

Miahuatlán ha cambiado mucho, no es la misma ni volverá a serlo. No sé aún si me gusta la nueva versión de la tierra que me vio nacer, pero mientras lo averiguo habrá un retiro de JME en la casa de mis padres allá. La gran mayoría de mis compañeros de clase ya no están (estamos) viviendo allí, sino que van (vamos) de visitas, las cuáles son cada vez más esporádicas. Poco a poco hemos perdido el contacto hasta transformarnos en vagos recuerdos de la niñez y la primera adolescencia. Seguro todos tenemos recuerdos así. Ahora la población se ha transformado para dar paso a los avencindados de otros pueblos, los pequeños poblados se mudaron para el centro del distrito y Miahuatlán pasó de ser un pueblo pintoresco, a un remedo de ciudad con urbanos, taxis, un bouleverd (?) y cada vez más vehículos. Sigue habiendo plaza los días lunes, pero ahora no dejan a nadie vender en el mercado si no es locatario (!) Tenemos un renovado "jardín" con sus monumentos, en realidad no hay mucho que ver, antes había el cielo... ahora me sigo preguntando ¿qué?

Sí, la vida cambia, nada se queda igual y todo evoluciona. Hay ciertos lugares y momentos especiales que quedan para ser recordados y acariciados en noches de lluvia, cuando huele a clausura y en el cielo se oye el rumor de viejos cantos e himnos. La vida nos ofrece la memoria como un premio de consolación ante el arrebatador ritmo con que la vivimos.

Hoy brindo por mi pequeño gran Miahuatlán.

3 comentarios:

  1. Jojoy. :)
    Hermanot que bueno tenerte de regreso.
    Por cierto claro que habemos muchísimos que no solo te recordamos, si no que va más allá del simple recuerdo lo que has llegado a formar. Como olvidar las logias, que por cierto deseo al menos una última en este mes. Y pues tenemos que echarnos el cafecito para que digamos salud y brindemos por el pequeño gran Miahuatlán :)

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  2. Abuelito
    Definitivamente nos falta una Logia, mi querido hermanito :) Hay tanto que contar, que decir, en fin.

    Me da gusto saber que, de algún modo, hay vidas entrelazadas con la mía, es otra forma -una de las mejores- de saber que estoy vivo.

    Un abrazo fraterno

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  3. Mi querido Coronel:

    Cuánto me he perdido!! O_O'

    Entre que te nos vas, en que pocas veces te veo en la escuela, ya sea por las clases ó porque te vas al "calabozo" en la dirección por tu servicio... extraño las pláticas de msn, las salidas "interrumpidas-canceladas", las sugerencias, consejos que me das.... saber que te irás no me pone triste. Me agrada mucho la idea, conocerás gente, aprenderás muchas cosas, me traerás juguetes ó chicas (jajaja), como bien dijiste, aprenderás a vivir solo ó al menos a valorar las cosas, a ser independiente.

    Te auguro un buen viaje, un buen futuro.

    un fuerte abrazo mi querido Coronel.

    A ver cuando me invitas a Miahuatlán. :)

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